Hoy ha debido hospitalizarse a causa de sufrir vómitos y fuertes dolores estomacales.
Desde el 13 de noviembre la activista saharaui, Aminatu Haidar, languidece en el aeropuerto de Lanzarote, España, indocumentada y lejos de su familia. Ella mantiene una huelga de hambre en protesta contra el gobierno de Marruecos, que le impide regresar al Sahara Occidental, de donde es originaria.
Fue expulsada el pasado 14 de noviembre del Sáhara Occidental hacia España por las autoridades de Marruecos, que le confiscaron su pasaporte marroquí cuando volvía de un viaje a Estados Unidos.
Reclama que se le deje regresar a El Aaiún, la capital del Sáhara Occidental, donde residen sus hijos, de 13 y 15 años de edad, pero las autoridades de Marruecos le niegan el permiso, alegando que renegó de la nacionalidad marroquí.
El lunes pasado los niños hicieron pública una carta en la que le piden al mundo que no dejen morir a su mamá, luego que la activista anunciara que suspendía toda atención médica, además de la ingesta de las medicinas que usualmente toma.
Las autoridades españolas están en un grave predicamento, pues por un lado se les acusa de ser demasiado suaves con Marruecos y por el otro si Haidar muere en su territorio dejaría mal parada su imagen como estado respetuoso de los derechos humanos.
Por ello, el domingo pasado intentaron alimentarla y medicarla por la fuerza, sin resultados, según dijeron los partidarios de Haidar. Alrededor de la activista de 42 años hay actores, políticos y otros personajes de la vida pública europea, que la apoyan y han lanzado fuertes críticas al gobierno español en los últimos días. Entre sus partidaros está el premio Nobel de Literatura, José Saramago.
SAHARA OCCIDENTAL
Como su nombre lo indica, es un territorio al occidente del desierto del Sahara, en África. Durante mucho tiempo estuvo bajo influencia del sultanato de Marruecos, pero en el siglo XIX los anhelos colonizadores de España y Francia los llevaron a ocupar grandes franjas.
España pasó a controlarlo exclusivamente en 1934 y lo mantuvo como colonia hasta 1975, cuando se firmó el “Acuerdo de Madrid”, mediante el cual la administración sería de España, Marruecos y Mauritania.
En febrero de 1976 España abandonó el territorio y lo dejó bajo tutela de los dos países africanos. Pero los habitantes, de mayoría saharaui, proclamaron la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y emprendieron una guerra de liberación del territorio contra Marruecos y Mauritania. El principal promotor de esta guerra es el Frente Polisario, acrónimo de Frente Popular de Liberación de Saguía el Hamra y Río de Oro, que fue fundado en 1973.
En 1979 Mauritania fue derrotada y debió firmar un acuerdo de paz. No así, Marruecos, que con ayuda de Estados Unidos materializó la ocupación de la mayor parte del territorio y, de hecho, es el administrador de una gran franja, aunque la Organización de las Naciones Unidas ni ninguna otra entidad internacional reconocen sus pretensiones.
Por ello los habitantes del Sahara Occidental viajan con pasaportes de Marruecos, el documento que le fue retirado a Aminatu Haidar y que la mantiene como una apátrida en Lanzarote, Islas Canarias.
En 1991 el Frente Polisario y Marruecos firmaron un alto al fuego con el auspicio de la ONU y se estableció que se haría un referendo en 1992 para que la población decidiera si aprobaba la existencia de la RASD o quería seguir bajo control marroquí. Sin embargo, el Frente Polisario acusa a los marroquíes de prorrogar indefinidamente el referendo mediante apelaciones con el propósito de que la población no saharaui instalada por Marruecos siga creciendo y que al final ellos decidan la votación. De hechos esa población ya es mayoría.
Actualmente, el territorio del Sahara Occidental se halla dividido por un muro de más de 2.000 km de largo que divide de norte a sur el Sahara Occidental. La zona al oeste del muro es el territorio ocupado por Marruecos, llamado «Sahara Marroquí», mientras que al este del muro están los denominados por el Polisario «territorios liberados» o «zona defensiva» para Marruecos.
La República Árabe Saharaui Democrática hasta el momento ha sido reconocida por 82 países, la mayoría africanos o latinoamericanos (Nicaragua, Paraguay y Uruguay, entre ellos), pero ninguno de los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU o de las grandes potencias.
AMINATU HAIDAR
Es madre de dos hijos y cursó estudios de literatura moderna. Es una célebre activista en aras de que la República Árabe Saharaui Democrática sea una realidad como Estado.
Saltó al activismo político a sus 21 años, cuando fue arrestada junto a 700 participantes de una manifestación que exigían el referendo para la independencia de Marruecos. Estuvo presa por cuatro años en “cárceles secretas”, sin cargos ni juicios.
En el 2005 cayó presa nuevamente, pero tras múltiples protestas alrededor del mundo fue liberada antes de cumplir una condena de siete meses.
Desde entonces se convirtió en embajadora itinerante de la República Árabe Saharaui Democrática en contacto con gobiernos extranjeros y asociaciones pro saharauis.
En agosto de 2006 Marruecos le denegó el pasaporte y el derecho de expatriación de sus dos hijos como medida de presión.
El 13 de noviembre de 2009, tras su llegada a El Aaiún procedente de Nueva York en un vuelo con escala en Las Palmas de Gran Canaria, fue expulsada del país marroquí hacia Lanzarote, Islas Canarias.
Tras su aterrizaje permanece en la Terminal 1 del Aeropuerto de Lanzarote donde inició también una huelga de hambre el 15 de noviembre. Ingiere únicamente agua y azúcar.
Su establecimiento en el aeropuerto responde a una medida de presión, pues acusa al Gobierno español de inhibirse en el asunto y actuar en connivencia con el Gobierno marroquí.